Episodio 1x02 - Las casualidades no existen, sólo existe lo inevitable

Un 3 de diciembre del 2011 a las 12:30 aproximadamente, conocí a la persona que cambió el rumbo de mi vida y le dio un sentido distinto.

Asistía al cumpleaños de la que en ese tiempo era sólo una amiga y que ahora se ha convertido en mi hermana (incluso vivimos en la misma casa), ese día estaba de mal humor y me dirigí con mucho desgano a la reunión, la cual se realizó en el jardín botánico de mi ciudad.

En dicha reunión había una pareja gay (todos mis amigos son de mente abierta), me sentía un poco incómodo al respecto, no porque me desagradasen, sino porque habían pasado unos días desde que había terminado mi relación con un chico y aún no lo superaba del todo (el origen de todos mis males en otro post), así que traté de adaptarme a la situación y pasé una bonita tarde con todos. En la noche nos fuimos al karaoke y a pesar del ambiente divertido, no pude evitar llorar (estaba sensible).

Un día común para mí terminó por convertirse en el primer día del resto de mi vida, ese día conocí a AnThony (el chico gay que estaba muy enamorado), esa reunión, esa amiga, ese día, parece como si todo hubiese estado planeado y desde entonces mi mundo ha ido dando giros muy interesantes. Dos días después entré a Facebook y vi que AnThony me había agregado a la página de Epicentro (centro comunitario gay que ahora es mi segundo hogar), me sorprendí porque no sabía en qué momento se dio cuenta de que yo también lo era (mi "radar" no sirve, a veces creo que no lo tengo). Empecé a asistir a las reuniones y todo fue cambiando desde entonces.

AnThony me ha enseñado a valorar la vida, a tratar a todas las personas por igual y superar mis prejuicios, a no tener miedo por cosas que el pasado a ido dejando atrás, me ha dado la esperanza para poder creer que existe un futuro para mí y que no debo rendirme frente a las cosas que suceden en el ahora. Me ha escuchado en los momentos malos y me ha abrazado cuando lo necesitaba, hemos compartido alegrías, paseos, juegos, tristezas. Lo quiero mucho, o es mejor decir que lo amo, es como el hermano que siempre he querido tener, lo que siento por él es distinto a lo que pude haber sentido por cualquier otra persona antes, estoy muy feliz por haberlo conocido.

Pero como no todo es para siempre, tendremos que adaptarnos todos los que lo conocimos y queremos, a un cambio en "el guión de la vida". Sabía que pronto iba a pasar y no quería recordarlo simplemente porque me daba tristeza, pero esta tarde se confirmó la fecha que tanto he deseado retrasar. AnThony se regresa a Noruega este 19 de setiembre. He aprendido tantas cosas de él, lo voy a extrañar mucho. 

Admito que me causa tristeza saber que no lo volveré a ver hasta dentro de 5 años, pero sé que su misión en esta vida se encuentra en aquel lejano país y confío en que logrará todo lo que se proponga.

La cuenta regresiva empieza hoy y debo aprovechar el tiempo que me queda al lado de mi amigo.