lunes, 10 de septiembre de 2012

Episodio 1x09 - Tenía que pasarme a mí porque soy fuerte y te puedo ayudar

 "El abuso sexual es todo acto o comportamiento que realiza una persona sobre otra sin su consentimiento o conocimiento y para su propia satisfacción sexual, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo"


Todo lo que nos pasa en esta vida nos ayuda de cierto modo, para darnos cuenta de las cosas, para mejorar la situación, para cambiar de rumbo, para buscar otras alternativas, en fin para muchas cosas, pero ¿qué pasa cuando nos ocurre algo que por más que le busquemos una razón de ser, no la encontramos y nos lamentamos respecto a ello?, pues hay que buscarle una razón para poder cambiar el mundo.
Primero hay que pensar que es muy probable que lo que te ocurrió a ti no es nada en comparación a lo que le pudo ocurrir a otra persona, pero te pones a pensar: "no importa el resto, me pasó a mí y me siento mal", pero ese sentirse mal es sólo una emoción que necesita ser liberada, sanada.

Desde que sucedió cuando tenía 6 años años, he tratado de buscar un punto de apoyo, una razón de ser, ese algo que me diga la razón de las cosas. Sí pues he llorado mucho, he maldecido, he deseado que todos los que hicieron esto mueran, he pensado en suicidarme, pero no lo intenté, más bien me he ido matando de a poco para poder pagar un "pecado" que supuestamente había cometido, pero en este caso, yo era la víctima. En ese tiempo no lo vi de ese modo porque me hacía sentir mal todo, porque tuve que callar durante muchos años y el lugar que me acogió hizo de mi vida un infierno. Aunque suene paradójico, ese lugar fue la Iglesia Católica, ahí aprendí a pagar por mis "pecados", ahí aprendí a ponerle sal en exceso a las comidas para que Dios me perdonara, también aprendí a hacer ayunos que me duraban todo el día como ofrecimiento a Dios y por último, aprendí a amarrarme con una cuerda la cintura para sentir dolor con cada paso que daba, claro, todo esto disimuladamente porque necesita que Dios perdone "mis pecados". ¿Pecados? sí pues, era una víctima cuyos pecados consistían en vivir amargado respecto a todo lo que le rodeaba gracias a alguien que le arruinó la vida sin importarle nada.

¿Trágico verdad?. Tenía muchas opciones en la vida, entre ellas estaba perderla, pero ESTOY AQUÍ, ESTOY VIVO.

Me ha costado varios años poder perdonar y este pequeño relato es la representación de un proceso de sanación que ha durado muchos años. Por otra parte, es muy triste lo que ha ocurrido y siento que si me ha pasado es por algo. Soy una persona fuerte, valiente y puedo ayudar a los demás, a partir de mis experiencias pasadas puedo ayudar a otras personas a superar sus traumas.

¿Razones por las que estoy aquí? - Porque la vida es bonita y me gusta estar vivo. Aún hay mucho por hacer. ¿Razones por las que escribí esto? - Porque necesitas saber que no estás solo, siempre habrán personas geniales que te darán una mano.

¡Ánimo!

5 comentarios:

  1. Estamos curando nuestras heridas... es un proceso largo y doloroso, pero cada acción valiente que damos, cada testimonio que damos, cada simple palabra que ofrecemos, es un pasito más hacia la superación personal... porque nada de lo malo que nos ha pasado en la vida, tiene un sentido a menos que a otro le pueda servir d inspiración. Eres valiente. Cuidate

    ResponderEliminar
  2. El proceso para curar heridas físicas es doloroso, primero hay que esperar a que los tejidos se reconstruyan, se forme una costra, y poco a poco desaparezca la Cicatriz. Pasa lo mismo con las Heridas del Alma. Son complicadas, porque toca perdonar, perdonar ofensas, perdonar situaciones no buscadas.

    El proceso de Sanación es largo y complicado, pero después viene la paz interior, la sensación de que todo esta en paz y que eres una Nueva Persona.

    Ardishita Te Quiero mucho.

    Valiente, hijo mio, sigue siendo valiente

    ResponderEliminar
  3. es muy triste lo que te ha pasado, eso explica porque la elección de tu carrera, ¿ya sabes en que te especializaras o lo sigues pensando?
    =)

    ResponderEliminar
  4. Es cierto. No fuiste el victimario, sino el victimado. Y para sanar, hay que perdonar.

    ResponderEliminar
  5. al terminar de leerte se ve vino a la mente una frase de Sartre, cada hombre es lo que hace con lo que hicieron de el.. sigue asi ;)

    ResponderEliminar